Dile chao a esa amarga sensación en tu boca y dale la bienvenida a la frescura y seguridad de un aliento agradable.

El mal aliento, o halitosis, es un problema común que puede ser causado por una mala higiene bucal, ciertos alimentos o problemas de salud. Si ya lo padeces es importante adoptar buenos hábitos de limpieza y cuidar la salud en general para eliminarlo de manera efectiva. Estos son 10 consejos para volver a tener un aliento fresco y agradable:

1. Cepíllate con Fluocardent® JGB al menos dos veces al día, mantén tu boca limpia, sorprende con tu aliento fresco y acércate con confianza a los demás.
2. Usa hilo dental Fluocardent® JGB diariamente para eliminar restos de comida entre los dientes.
3. Toma suficiente agua para mantener la boca hidratada y ayudar a eliminar bacterias.
4. Limita el consumo de alimentos que causan mal olor, como ajo, cebolla y ciertas especias.
5. Mastica chicles o dulces sin azúcar para estimular la producción de saliva.
6. Evita el tabaco, ya que reseca la boca y contribuye al mal aliento.
7. Realiza enjuagues bucales, especialmente después de las comidas.
8. Consulta regularmente a tu dentista para descartar problemas de salud oral.
9. Come alimentos ricos en fibra, como frutas y verduras, que ayudan a limpiar la boca.
10. Evita el consumo excesivo de café y alcohol, que pueden contribuir a la resequedad y el mal aliento

Tipos de mal aliento

El mal aliento puede originarse por diferentes causas, y entender su origen es fundamental para combatirlo adecuadamente y eliminarlo efectivamente.

Existen diversos tipos de halitosis, cada uno con características y razones específicas, que pueden ir desde factores externos, como ciertos alimentos, hasta problemas de salud bucal o del sistema digestivo.

A continuación, te presentamos los principales tipos de mal aliento y sus causas más comunes. ¡Aprende a identificar cuál padeces y actúa conforme a ello!:

• Mal aliento oral: es el tipo más común y suele estar relacionado con una mala higiene bucal. Se origina por la acumulación de bacterias en la boca, sobre todo en la lengua, encías y dientes, que producen compuestos malolientes.
• Mal aliento extraoral: no se origina en la boca, sino en otras partes del cuerpo, como el sistema digestivo o las vías respiratorias. Puede ser causada por problemas como infecciones pulmonares, sinusitis o enfermedades del hígado y riñones.
• Mal aliento alimentario: provocado por el consumo de alimentos con olores fuertes, como ajo, cebolla y especias. Estos alimentos pueden liberar compuestos de azufre que, al ser absorbidos y exhalados, generan mal olor en el aliento.
• Mal aliento por ayuno: surge al pasar largos periodos sin comer, ya que la producción de saliva disminuye, lo que provoca sequedad en la boca y permite que las bacterias proliferen, generando mal olor.
• Mal aliento crónico: es una condición persistente que requiere tratamiento especializado, ya que puede estar relacionada con problemas serios de salud bucal, como la periodontitis, o con enfermedades sistémicas que requieren atención médica.

¿Es necesario visitar a un especialista por mal aliento?

Aunque el mal aliento ocasional puede ser común y en la mayoría de los casos se resuelve con una buena higiene bucal, existen situaciones en las que es importante acudir a un especialista. Si el mal aliento persiste a pesar de un cepillado regular, uso de hilo dental y enjuague bucal, puede indicar problemas más serios, como infecciones en las encías, caries profundas o acumulación de placa que solo un profesional dental puede tratar.

Además, si notas que el mal aliento es particularmente fuerte o recurrente después de consumir ciertos alimentos o bebidas, es posible que necesites asesoría para ajustar tu dieta y reducir los factores desencadenantes.

También es recomendable consultar a un especialista cuando el mal aliento persiste sin una causa evidente, como en casos de halitosis extraoral, donde el origen del problema puede no estar en la boca.

Este tipo de halitosis podría estar relacionado con enfermedades respiratorias, digestivas o sistémicas, como la diabetes, infecciones respiratorias o problemas hepáticos. Un especialista podrá hacer un diagnóstico adecuado para identificar el origen y recomendar un tratamiento personalizado, ya sea odontológico o médico, que te ayude a mejorar tu salud y eliminar el mal aliento de manera efectiva.

Preguntas frecuentes:

1.- ¿Puede el estrés causar mal aliento?

Sí, el estrés puede contribuir al mal aliento. Cuando estamos estresados, la producción de saliva puede disminuir, provocando resequedad en la boca y permitiendo que las bacterias responsables del mal olor se acumulen con mayor facilidad. Además, el estrés puede afectar la digestión, lo que también puede contribuir al mal aliento en algunas personas.

2.- ¿El uso de ciertos medicamentos puede causar mal aliento?

Sí, algunos medicamentos pueden contribuir al mal aliento, especialmente aquellos que tienen como efecto secundario la reducción de la producción de saliva. Entre estos se incluyen antihistamínicos, antidepresivos y medicamentos para la presión arterial. La sequedad bucal resultante de estos fármacos facilita el crecimiento de bacterias que generan mal olor, por lo que es importante hablar con un médico si se sospecha que un medicamento está contribuyendo a este problema.